Mercedes Castellanos, Paula Arcos, Eli Cesáreo, Shandy Barbosa y Almudena Rodríguez son parte de la convocatoria realizada por el entrenador nacional de balonmano femenino, José Ignacio Prades, para participar en el Carpati Trophy, que se llevará a cabo del 29 de septiembre al 1 de octubre en Rumanía como parte de la preparación para el Campeonato de Europa 2022 en noviembre.
El equipo de José Ignacio Prades, que se coronó campeón de los Juegos Mediterráneos este verano al vencer a Portugal en la final en Orán, regresa a la acción con el Carpati Trophy, enfrentándose a Serbia, Austria y al equipo anfitrión, Rumanía. Esta competición será crucial para evaluar el nivel del equipo de cara al Europeo, programado entre el 4 y el 20 de noviembre en Macedonia del Norte, Montenegro y Eslovenia.
En la convocatoria de Prades regresan jugadoras con una amplia experiencia internacional, como Mercedes Castellanos (Costa del Sol Málaga), Paula Arcos (Super Amara Bera Bera), Eli Cesáreo (JDA Dijon), Shandy Barbosa (CBM Morvedre) y Almudena Rodríguez (Rocasa Gran Canaria). Algunas jugadoras que ganaron la medalla de oro en Argelia en julio también repiten, como Ona Vegué (KH-7 Granollers), Maddi Aalla (Super Amara Bera Bera), Paula Valdivia (CB La Calzada) o Alba Spugnini (Rocasa Gran Canaria).
Las ‘Guerreras’ se concentrarán el 26 de septiembre en el Centro de Alto Rendimento (CAR) de Madrid y partirán hacia Rumanía el 28. España ganó cinco de los seis partidos disputados en la fase de clasificación para el Campeonato de Europa 2022, pero en la edición anterior, el equipo fue eliminado en la segunda ronda.
José Ignacio Prades describió este torneo como una «antesala del Europeo» y destacó su importancia como una prueba desafiante contra equipos fuertes como Rumanía, Serbia y Austria. Para Prades, el Carpati Trophy será crucial para disipar dudas, dar minutos de juego a las jugadoras con menos experiencia y encontrar el equilibrio entre las jugadoras más jóvenes y las veteranas. El entrenador también señaló que los Juegos Mediterráneos fueron una prueba importante para evaluar el potencial de nuevas jugadoras en la selección, y se mostró satisfecho con el aumento en el número de jugadoras que podrían ser relevantes para el futuro del equipo.